Este no es un proceso fácil. Se necesita paciencia y dedicación para poder lograrlo satisfactoriamente. Como todo aspecto relacionado al comportamiento felino , el tiempo que tome la hazaña depende del gato.
La manera más eficiente es comenzar la educación cuando el gatito es bebe tan temprano como a sus 3 ó 4 semanas, así lo vas acostumbrando poco a poco. Pero si tu gato ya es adulto, el proceso es viable pero tomará un poco de más tiempo.
Es importante aclarar que antes de comprarle el cepillo eléctrico y la pasta dental para abrillantar los dientes sepas que los productos para humanos son tóxicos para el minino.
la Boca de tu gato:
Hay que saber el aliento de un gato es siempre fuerte, debido a su régimen carnívoro.
Este olor debe distinguirse de la halitosis (mal aliento) debida o bien a la actividad de las bacterias que se encuentran en la cavidad bucal o bien a la eliminación por vía oral de desechos que deberían eliminarse por el riñón a través de la orina.
Así pues, el aliento de un gato urémico es fácilmente reconocible.
La acumulación de sarro y de restos alimentarios en descomposición lenta puede provocar afecciones de los dientes y encías.
El depósito de sarro (que puede alcanzar proporciones impresionantes) es consecuencia de la acumulación de sales minerales de la saliva (en especial de calcio) o contenidas en los restos de alimentos, sobre la placa dental.
Hay que señalar que los dientes de los gatos alimentados con comida blanda son más sensibles a la enfermedad periodontal. Las croquetas precisan una masticación más larga y un ligero efecto abrasivo sobre las coronas dentales.
Ciertos compuestos, denominados quelantes de calcio, permiten limitar la formación de sarro y van incorporados en la fórmula de algunos alimentos de gama alta.
El sarro puede acumularse rápidamente y provocar gingivitis. Una exploración rápida de la cavidad bucal permite evaluar la necesidad de una limpieza dental.
La mejor solución para prevenir el depósito de sarro consiste en lavar a diario los dientes del gato, sobre todo si se le ha ido acostumbrado desde muy joven (utilizándose un dentífrico específico para gatos, ya que los destinados al uso humano no están adaptados). Sin embargo esta medida es difícil de llevar a la práctica, lo más recomendable es utilizar alimentos que prevengan la formación del sarro.
En cualquier caso, si el sarro está muy extendido hay que recurrir al veterinario para que realice una limpieza dental bajo anestesia general.
NOTA:
Realiza suaves movimientos a la hora de cepillar los dientes de tu gato. Debes tener el mismo cuidado con el que se lo harías a un niño pequeño e incluso a ti mismo. La mayoría de los gatos no te permitirá cepillar la superficie interior de los dientes, pero al menos sí se dejará limpiar el exterior de las superficies. Asegúrate de llegar a los molares y los caninos superiores. Estos dientes tienden a formar rápidamente el sarro.
Trate de lavarle los dientes tan a menudo como sea posible. Todos los días sería lo ideal pero, recuerda que lo mejor es que le acostumbres desde pequeño a esta rutina diaria para evitar enfados innecesarios cuando son ya gatos mayores.
Respuesta: El proceso
• Para ir acostumbrando al gato, siéntalo en tu falda y dale masaje suave en el área de su boca. Repite el proceso diariamente hasta que el gato se sienta a gusto con el masaje.
• Si el gato se molesta y trata de escapar, déjalo tranquilo e intenta el próximo día. La idea es que no lo vea como algo negativo y si lo fuerzas a quedarse terminarás de seguro mordido y con un gato muy enojado.
• Cuando el gato esté relajado, mientras lo acaricias con una mano utiliza el dedo índice de la mano contraria para subirle el labio y darle masaje a las encías. Esto puede tomar un poco de tiempo en lograrse. Recuerda ser constante y tener paciencia.
• No trates de cubrir toda la boca en el mismo momento. Haz un lado de la cara a la vez.
• NOTA: Si encuentras algún absceso o parte de la encina hinchada es momento de detener el proceso y llamar al veterinario. Puede tener alguna infección.
• Si el gato no hace intento de morder, pasa al próximo punto. Coloca un pedazo de gasa (la misma que se utiliza para cubrir heridas) alrededor de tu dedo índice y repite el masaje en las encías, pero comienza a incluir también los dientes.
• Una vez se acostumbre a la gasa, puedes comenzar a utilizar el cepillo de dientes. Este puede ser uno diseñado para niños pequeños pero también puedes conseguir uno especial para gatos.
• Usa el cepillo de la misma manera que usaste el dedo con gasa.
• Alternativas: Puede que a tu gato no le agrade el cepillo y tengas que volver al dedo. En la tienda de mascotas puedes encontrar también un cepillo de goma que se coloca en tu dedo y causa el mismo efecto que el cepillo. Quizás a tu gato le resulte menos invasivo.
• Es momento de traer la pasta dental.
• Antes de llenar el cepillo o el dedo de pasta, es mejor que vayas poco a poco. Un truco es usar el agua de la lata de tuna en vez de pasta para irlo acostumbrando a la sensación. También es bueno colocar el tubo de pasta cerca de su nariz para que huela, quizás hasta come un poco. Lo importante es quitarle el miedo. La pasta dental para gatos viene con sabores a pescado y hasta pollo para hacernos la vida más fácil.
• NO necesitas una gran cantidad de pasta. Coloca un poco en el dedo o cepillo y pásalo por las encías y los dientes alrededor de los labios con movimientos suaves dándole mayor importancia al área en que la encía llega al diente. Es ahí donde usualmente comienzan los problemas dentales.
• No necesitas cepillar el lado alrededor de la lengua. La textura de su lengua mantiene ese lado limpio.
• Al terminal, dale un bocadito y mucho cariño. Repite el proceso 2 ó 3 veces al mes.
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